El 14 de diciembre de 2010, Luis García Yañez, más conocido como el Pato o el Negro, falleció a los 72 años. Hoy se cumplen nueve años de su partida, pero su trascendencia está más viva que nunca. El pilar formado en San Fernando es uno de Los Pumas del 65’, el equipo que le dio un nombre y marcó para siempre la identidad del seleccionado argentino.

Convocados por la Unión Argentina de Rugby, algunos de sus compañeros de aquella gira lo recordaron. “El Negro junto con el Nono Aniz llevaba la parte sentimental argentina de gira. Escuchábamos tangos, llevaba la yerba mate, la bombilla y en cada ciudad tomábamos entre todos”, rememora Guillermo Illia.

Pochola Silva dice que era como un hermano: “era unión permanente. Él atraía y acogía a los más chicos, les daba cariño y les enseñaba como era”. En la misma línea, Bobe Cazenave lo destaca: “era un ejemplo de compañerismo y esfuerzo. Siempre nos estaba empujando a ser cada vez mejores”.

Además de jugar, García Yañez fue médico del seleccionado durante un largo tiempo. Pero lo más curioso de su polifuncionalidad era en otros deportes. En su club San Fernando, a la vera del río, demostró sus cualidades anfibias y compitió con grandes resultados en natación y remo.

“Un fenómeno en todo sentido de la palabra”, dice el Gato Handley, que reconoce que lo extraña. “Un extraordinario jugador, pero mucho mejor persona. Compañero, preocupado por todos, extraordinario motivador”, lo resume Coco Benzi. Invitados a definirlo en una sola palabra, Manuel Beccar Varela eligió “transparente”, Luis Gradín se extendió algunos caracteres con su respuesta de “inoxidable de cuerpo y alma”; mientras que Nicanor González del Solar eligió los adjetivos “lealtad, ayuda y nobleza”.

Las palabras de Jorge Dartiguelongue emocionan y resumen el sentir de todo un equipo: “Negro querido, no te fuiste. Seguís estando entre nosotros. Allá en Sudáfrica, en Jorge Newbery y también cada vez que voy a San Fernando te veo. Te veo haciéndonos correr, levantar pesas, gimnasia. Fuiste un jugador de rugby por excelencia y sobre todo un hombre por excelencia. Por eso fuiste feliz y por eso estás todavía entre nosotros”.